Todos hemos experimentado personas tóxicas en nuestras vidas; algunas en forma de amigos o familiares, otras como compañeros o compañeras de trabajo. No es fácil convivir con estas personas que pueden intentar manipular o inmiscuirse en la vida de otros, con caprichos o arbitrariedades.

Las personas tóxicas en la mayoría de las ocasiones, son muy propensas a juzgar al resto, señalar y mostrar conductas intransigentes. En el mejor de los casos, estas personas se expresan con crudeza e ignorancia, y es bastante común que no den su brazo a torcer con sus interlocutores, esto como método de autodefensa en contra de cosas que no les parecen correctas.

Vienen en todas las formas y tamaños y si te ves en una situación en la que debas lidiar a diario con estas, es conveniente que sepas cómo identificar sus características y así puedas manejarlas con más asertividad y sobre todo, no dejar que afecten tu desempeño, ni tus actividades.

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Características de una persona tóxica

Puede ser difícil reconocer a una persona tóxica, pero es una habilidad que debe aprenderse. Una persona tóxica puede causar conflictos, y en general, disminuir tu calidad de vida. Aquí las características que te ayudarán a identificarla:

Son egocéntricas y/o egoístas

Las personas tóxicas encierran un alto grado de egocentrismo y egoísmo, así, constantemente hablan e intenta voltear cualquier tema sobre el que se esté hablando hacia sí mismas. Harán esto en exceso y olvidándose por completo de aquello y aquellos que la o lo rodean.

De forma consciente o inconsciente, las personas tóxicas buscarán siempre alimentar su ego sin importarles que lo que busques cuando entablas conversación con ellas o restarán importancia a lo que te sucede, pero en el caso de que sean ellas las afectadas, buscarán la forma de llamar la atención y de que sus necesidades se satisfagan, incluso si parecen banales o superficiales.

En muchos casos son esta clase de hombres o mujeres los que acusarán a otros de querer desviar la atención del problema que están atravesando.

Constantemente se hacen las víctimas

Un papel que rápidamente adoptan las personas tóxicas, es el de víctima.

Esta posición de víctimas no solo les sirve para atraer la atención de todo el que las escuche o entre en contacto con estas, sino que también les sirve como justificación para todo lo que según ellos va mal en sus propias vidas.

El problema con esta conducta cuando entramos en contacto directo con ella, es que puede parecer atractiva y hacernos creer que en realidad otras personas y otras cosas pueden ser culpables de lo que nos sucede o deja de sucedernos, cosa que se aleja bastante del hecho irrefutable de que independientemente de nuestras circunstancias, debemos hacernos responsables de lo que nos suceda y actuar para que lograr las cosas en vez de dejar que siempre la situación decida por nosotros.

Son pesimistas y/o negativas

¿Has notado como hablar con ciertas personas se te torna difícil, una tarea nada placentera, algo que no te hace sentir bien?

Hablar con una persona tóxica siempre te hará sentir pesado, negativo, sin posibilidad alguna de encontrar resolución. No queremos decir que no exista el positivismo falso (que también es otra forma de toxicidad). Nos referimos a que una persona tóxica siempre está llena de quejas, de imposibles, de críticas hacia otros más que hacia sí misma, centrarán su atención solo en los problemas y nunca en las soluciones.

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Envidiosas y celosas

Una característica recurrente de las personas tóxicas, es que siempre van intentar restarle mérito a cualquier logro que compartas con estas, lo harán ver menos, buscarán el lado negativo de lo cualquier cosa positiva que haya ocurrido. En el peor de los casos, se harán los indiferentes ante tus logros.

El arte de desanimar es uno que perfeccionan y siempre intentarán disfrazarlo con sus ganas de verte dar lo mejor de ti, o con criticar constructivamente desechando tus ideas, decisiones, etc.

Hay muchas otras actitudes que puedes notar en una persona tóxica, una de las que siempre debería darte una señal, es que comparen tus logros al de otros, haciendo resaltar lo mejor del otro.

Tienden a tomar el crédito por el esfuerzo de otros

Las personas tóxicas serán muy propensas a tomar el crédito por el esfuerzo e iniciativa de otros, esto ante su propia falta de iniciativa y esfuerzo.

Muchas veces esto se torna en un tipo de abuso en el que sin duda, la buena voluntad de alguien se aprovecha como medio para quedar bien sin en realidad haber aportado mucho.

Dinámicas como estas son vistas en todo tipo de ámbitos, tanto personales como profesionales.

No l@s verás alegrarse por nadie más

Si alguien en su mismo entorno consigue algo, no serán capaces de ver lo positivo y en cambio responderán con críticas destructivas.

Son intransigentes

Una persona tóxica, no se detendrá a analizar sus propios puntos de vista o comportamiento, porque siempre pensarán que están en lo correcto y que sus acciones no pueden perjudicar a otros en su entorno.

Demuestran exceso de confianza en sí mismas

Resaltarán siempre sus cualidades físicas e intelectuales, presumiendo de lo que pueden hacer, pero actuando muy sensibles cuando se les critica.

Hacen caso omiso a lo que puedan aprender de otros

Muy ligado a lo intransigentes que pueden llegar a ser, las personas tóxicas no admiten que otra persona les enseñe algo que desconocen u otra forma más efectiva de hacer las cosas.

Son personas infelices a pesar de que quieran demostrar lo contrario

Las actitudes negativas, falta de iniciativa y sus constantes ganas de victimizarse, llevan a las personas tóxicas a ser seres en extremo infelices, cosa que querrán esconder siempre y aparentar en cambio que todo va bien para ellos.

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¿Por qué son tóxicas?

En muchas ocasiones, lo que hace que una persona se convierta en tóxica para otras, son sus propios miedos y frustraciones. Estas terminan por traducirse en conductas dañinas que afectan a otros, pero que esta persona, quizá por su misma toxicidad, no puede ver y en caso de que lo haga, ya ha llegado a un punto en que no le importa y sigue infligiendo este daño a otros.

En entrevista con la sección S Moda del Diario El País, la psicóloga española Silvia Olmedo afirma “la falta de seguridad, el miedo al cambio y a la incertidumbre o una baja autoestima nos pueden conducir a hacer cosas que nos dañen a nosotros mismos y la gente que nos rodea”.

Esto según Olmedo, es lo que lleva que “busquemos controlar a las personas que tenemos a nuestro alrededor, tratemos siempre de imponer nuestra voluntad o necesitemos ser el centro de atención, probablemente porque hay algo en nosotros que nos está causando daño”.

En resumen, nada es creado en una burbuja, y en el caso de las personas tóxicas; años acumulando emociones negativas y no haber encontrado las herramientas adecuadas para lidiar con estas, es lo que puede llevarlas a usar a otros como medio para desahogar sus propias frustraciones.

Ahora bien, sea que nos relacionemos con personas tóxicas, que la tengamos como pareja, compañer@ de trabajo, jefe, amigo, familiar, o seamos nosotr@s esas personas tóxicas, la pregunta es: ¿Pueden cambiar? ¿Podemos cambiar?

Sin duda se trata de un trabajo de introspección profundo y que no sucederá de la noche a la mañana, para cambiar conductas habituales y hacer una desintoxicación que les permita a esas personas, o nos permita (si es el caso) tener relaciones más sanas con otros.

En este vídeo, la psicóloga Silvia Congost responde a esta pregunta desde su propia perspectiva:

Tipos de personas tóxicas

Hay varios tipos de personas tóxicas que podemos identificar de acuerdo a sus características:

Envidioso

Es una persona que desea lo que otros tienen y tienen una actitud negativa cuando otros consiguen lo que esta no. Tienden a hacer comentarios negativos respecto a los logros de otros y restar importancia a sus logros.

Manipulador emocional

Esta persona asegura ser tu amig@ y luego utiliza todo lo que le has confiado en tu contra para hacerte sentir mal. No se trata de que divulgue secretos, sino que manipule con lo que sabe/conoce.

Dictador

Casi siempre son personas con autoridad que la utilizan para abusar de otros y hacerlos sentir inferiores.

Negativos

Todo lo ven con un lente pesimista, se quejan constantemente y le sacan el lado negativo a todo, incluso cuando el tema es alegre o positivo.

¿Cómo tratar a una persona tóxica?

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Aunque es muy frustrante tratar con personas tóxicas, es posible enfrentarse a ellas y minimizar el impacto que tienen en tu vida:

Según el sitio web de psicología La Mente es Maravillosa: “La forma en que manejan las personas inteligentes a las personas tóxicas responde a una serie de factores. El primero es la asunción simple y evidente de que todo comportamiento tóxico carece de lógica.”

Entender un comportamiento y verlo por lo que realmente es, nos ayudará a lidiar mejor con este tipo de personas. Esto en el caso de que tengas que tratar con estas todos los días y no puedas alejarte de una vez por todas de estas conductas.

Otro factor que nos permitirá lidiar con esto según el mismo portal web: “Experimentamos mayor estrés, ansiedad, agotamiento y problemas para concentrarnos y pensar con claridad. Tener claro este detalle desde un principio nos animará a establecer adecuados límites.”

Sabiendo esto, es importante:

  • Establecer los límites adecuados que den un mensaje a esa persona de hasta dónde puede llegar contigo, qué te puede decir y qué no.
  • Autorregular tus emociones para saber cómo lidiar asertivamente con estas personas y no caer en juegos que dañen tu salud mental.

Si quieres conocer más tips para tratar con este tipo de personas, en este vídeo, la Coach Paola Herrera nos enseña a neutralizar este tipo de conductas y así puedas alejarlas de tu vida:

Consecuencias ¿Por qué te tienes que alejar?

Imagen cortesía de Unsplash.com

Una persona tóxica es una persona que tiene una actitud negativa, degrada a los demás y sólo señala lo malo de algo. Estas personas no nos inspiran a ser mejores individuos.

A las personas tóxicas no les importa la opinión de los demás porque sólo se preocupan por lo que les puede beneficiar.

Cuando estamos cerca de personas tóxicas, nos sentimos menos seguros de nosotros mismos y tenemos una sensación de inferioridad. Estar cerca de alguien con una actitud negativa puede afectar a nuestra propia salud mental, por lo que queremos mantenernos lo más lejos posible de ellos.

Aquí otras consecuencias de mantenernos cerca de personas tóxicas:

  1. Desgastan tu energía y hacen que te enfoques solo en lo negativo en vez de lo maravilloso que todo puede resultar.
  2. Te hacen creer que ese estado mental negativo es la norma y que creando excusas y no tomando responsabilidad por tus actos, lograrás algún tipo de avance o compensarás por el hecho de que las cosas no vayan bien.
  3. Te hacen sentir agotado todo el tiempo, sin ganas de enfrentar los retos de la vida y en dado caso que los afrontes, lo harás con pesimismo y desanimo.
  4. Dejarás de mostrarte amor propio y valorar amistades, eligiendo siempre enfocarte en lo negativo, en lo que otros tienen y tú no.
  5. Internalizarás conductas que ves en otros, creerás que todo está en tu contra, el miedo no te dejará actuar para conseguir lo que quieres, porque creerás que todo conspira para que no consigas lo que te propones.

Las personas tóxicas deben elegir por sí mismas superar esta condición y convertirse de nuevo en personas que puedan aportar más que negatividad al entorno.

Todos en algún punto hemos lidiado con este tipo de personas o hemos demostrado algunas de estas actitudes.

Lo importante es identificarlas y no dejar que nos dañen o dañen a otros a nuestro alrededor.

La entrada Personas tóxicas: sus características y cómo tratarlas se publicó primero en Cooltasti.co.

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